"AYÚDAME A VIVIR" DOCUMENTAL DE ATREVIDA PRODUCCIONES. ESCRITO DEL RESPONSABLE DE PROYECTOS DE FORMACIÓN POLICIAL, RAFAEL CARRIET.
21 noviembre 2020 Todo el día
Soy Rafa el Carriet , agente jubilado de la Ertzaintza, tras 35 años de servicio.
Presidente y director técnico de la escuela de artes marciales y deportes de combate “Atama”, de Eskoriatza, Gipuzkoa.
En la actualidad ostento el cargo de seleccionador nacional del Departamento Nacional de Kenpo de la Real federación española de Karate.
También soy el responsable de formación policial de la “Asociación Andaluza de
Prevención del Suicidio Policial” (AAPSP).
Llevó más de 40 años practicando y enseñando artes marciales y deportes de combate,basando siempre tanto la práctica como la formación en la trasmisión de valores, sobretodo el respeto, la solidaridad, el esfuerzo y la humildad.
Esta convicción en los valores humanos fue la que me empujo a entrar en la Ertzaintza y ayudar a la ciudadanía dando lo mejor de mí a los demás y recibiendo de ella más de lo que yo daba, sintiéndome orgulloso de ser ese punto de apoyo en los momentos de crisis.
También mi trabajo y pasión me dio la gran oportunidad de conocer a grandes
compañeros y compartir con ellos los buenos y malos momentos que nos deparaba nuestra profesión y vida.
Entre ellos mi amigo y hermano de armas Alberto.
Un buen día mi compañero, amigo y hermano de armas, “EL PRESI”, Alberto Martín,me llamo para comentarme como se encontraba tras sufrir sus repetidas operaciones de espalda, y como estas le iban a obligar a dejar su profesión “POLICIA-ERTZANTZA”y pasión, la labor social de protección de los y las ciudadanas, la ciudadanía.
Y todo lo que ello le estaba haciendo sentir, su incertidumbre sobre cómo sería su vida en adelante, la necesidad que tenia de ayudar a todos los que se enfrentaran, como lo hicimos nosotros a esta situación, donde solo ves una definitiva, triste y desgraciada salida, acabar con el sufrimiento quitándose la vida.
Yo entendía su situación perfectamente, ya que como Alberto estaba condenado a dejar mi pasión profesional, la policía y dentro de ella la formación.
Tanto Alberto como yo pertenecíamos al equipo docente de la academia de vasca de seguridad y emergencias, y también como el, tras varias operaciones quirúrgicas, en mi caso la sustitución de mis maltrechas caderas por dos sendas prótesis completas,aparejaban la separación del servicio antes de tiempo, dejándome en una situación de incertidumbre personal y con un cambio radical de mi vida, ¿y ahora qué?
Nuestra carrera profesional nos puso a prueba durante los años más duros de la
sinrazón del terrorismo de la banda terrorista “ETA”, donde vimos a compañeros perder la vida por bárbaros atentados, y sentir el hachazo de las enfermedades mentales, que dejaron a otros postrados, y empujaron a algunos a la terrible lacra policial, siempre escondida, el suicidio.
Así que cuando Alberto, mi hermano, me invito a colaborar con él en este proyecto no dude ni un segundo en ponerme a su disposición y juntos luchar, primero estando disponibles para los compañeros que se enfrentan a esa terrible decisión de terminar con todos sus problemas y que solo necesitan que se les escuche y ayude con calidez y cariño para que sepan que no están solos, y en segundo lugar en buscar fórmulas para que esto no llegue a ocurrir.
Por ello se organiza dentro de la asociación la escuela de formación, para ofrecer distintas opciones a aquellos que creen que su vida ha acabado, ya que creen que no les queda nada por hacer y se sienten frente al abismo.
Desde la AAPSP, se ofrece un amplio catálogo de cursos y un amplio colectivo formado por psicólogos, integradores sociales prestando su ayuda a todo aquel que lo solicite.
También hacer notar la importante labor que la AAPSP, ha llevado a cabo durante esta crisis sanitaria del COVID-19, ayudando a las personas con necesidades y grupos de riesgo.
Es aquí donde aparece la llamada de todos los que necesitan ayuda para continuar “AYÚDAME A VIVIR”.
Por ello quiero mostrar mi apoyo al proyecto de “Atrevida Producciones”, dirigido por Alberto Flechoso, “AYUDAME A VIVIR”, para que se convierta en una realidad que ayude a las personas a enfrentarse a esas terribles situaciones, que sepan que siempre hay una salida aunque no la veamos y a los demás a saber que en esta problemática todos podemos ser parte de la solución.